Arantxa Bisutería (Mª Aránzazu Barcenilla Rodríguez) - Valladolid, Valladolid

Viviana Silvia

Hoy conocí este pequeño "gran" comercio de la Rondilla en Valladolid.
Arantxa, muy profesional y paciente ha sabido ofrecerme lo que buscaba. Cantidad de accesorios y bisutería hechos por ella. Me encantó y me fui con un precioso collar y un bolso

OpositaSS

Artesanía hecha con mucho cariño, con mucho cuidado.
Figuras con todo detalle y una atención exquisita.
Calidad//Precio inmejorable

Roberto Manrique

La tienda aunque es pequeña te puede enamorar si te gustan los productos artesanales.
Hablando con Arantxa todo lo hace ella, sabes que lo que tiene es único y si no te gusta el color de un colgante (por ejemplo) te puede hacer otro del color que más te guste.
Ya quedan pocas tiendas así, productos únicos a precio asequible y una atención inmejorable.

Conchi Largo

Entrar en la tienda, es un lugar encantado! Arancha es un amor de persona y sencillez. Artesanía pura. Gracias.

jcapolo

Estupenda tienda de ensueño para comprar y una mejor atencion de Arantxa, genial para quien le guste las hada elfos y demas, sin dudar volveremos a comprar alli, Gracias Arantxa

Alfonso Suárez

Cuando el crepúsculo se hace presente y la luz del día desaparece, las Damas de la Noche, las Hadas, se despiertan poco a poco y salen de sus preciosos hogares .. Entre risas, juegos y piruetas voladoras, pasan buenos ratos persiguiéndose unas a otras entre flores y plantas salvajes.

De entre todas las Hadas, existe una, que de siempre fue rebelde y ya, desde muy pequeña, solía desobedecer normas y no admitía "consejos vendidos", ella prefería conocer el mundo por propia experiencia y aprender de sus aciertos y de sus propios errores .. era única y especial.

Cuando nadie la observaba, escapaba sola del bosque y volaba hacia lo desconocido.

Una noche más, una noche oscura, ella salió del bosque y voló y voló.. y tanto voló, que en su inconsciente vuelo, la joven hada, se perdió y no supo volver al bosque.

Cansada y muy nerviosa, casi exhausta y a punto de abandonar, a lo lejos vio luz.. mucha luz. Era la ciudad, sitio prohibido para ella por los grandes peligros que en ella hay.

Desorientada, agotada y sin fuerzas, volaba peligrosamente sobre la gran urbe cuando un ser malvado logró verla. Casi sin poder aletear, bajó a ras de suelo y se posó en lo que ella pensó que era un árbol raro con una especie de luz .. lo que llamamos, una farola.

Mal momento para descansar pequeña, pues el malvado ser, viendo su debilidad la capturó.

Metida en una especie de jaula, y zarandeada por los bruscos movimientos en la carrera por las calles del secuestrador, el hada dentro de la jaulita, rebotaba violentamente contra los barrotes cuando al ir a dar contra uno de ellos, un cerrojo se soltó, y una pequeña puerta se abrió bruscamente y el hada cayó al suelo, donde quedó tendida e inmóvil mientras el malvado continuaba su frenética carrera sin darse cuenta de éste suceso.

Ella, casi inconsciente y sin poder moverse, sentía frío, dolor y miedo.. la inmensa soledad y la paz que da el agotamiento extremo, se tornó en sobresalto cuando algo cogió su mano y tiró de ella. Levantó la mirada y entre sobras reconoció algo.. era un ser humano, y era el primero que veía y había oído cosas muy malas sobre el mismo..

El pánico la congeló y la paralizó aún más, agachó su cabeza, cerró los ojos y comenzó a llorar.

El humano había oído hablar que existía un mágico lugar en la ciudad, donde algunas hadas, muchas noches, se juntan, y volando, salen del bosque con destino a la ciudad.

En este maravilloso viaje, a veces, .. y al ver sus resplandecientes y bellos cuerpecitos pasar volando, también se van uniendo Hadas de diferentes lugares.

Mientras, en sus hogares, los seres humanos duermen, y las calles están vacías. Ellas, volando sobre y entre los edificios, sobre los ríos, los parques y las calles, van dejando sutiles aromas allá por donde pasan .. y, a veces, .. ya cansadas del viaje, paran un poco de aletear y descansan entre las ramas de algunos árboles de la ciudad.

Todas las noches, sin faltar ninguna, se dirigen hacia un punto en concreto del popular Barrio de La Rondilla en Valladolid, para poder visitar uno de sus sitios preferidos .. entran en él, y con sus alitas, espolvorean su magia por el taller, la tienda y por todas las obras de arte que Arantxa, imagina y crea en "La Tienda de las Hadas".

El humano que se encontró a la joven hada perdida, conocía el lugar y fue allí donde la llevó metida en una cajita.

Él la explicó y la contó que por la noche, ellas vendrían y ella esperó mientras cogía fuerzas.

Y como todas las noches, las hadas acudieron a este lugar
tan especial, sin saber que allí esperaba la pequeña. Su cuerpecito daba apenas una luz tenue, pero ellas bien la vieron.

Esa noche fue espectacular ! Y contentas volvieron juntas a su bosque.

En éste establecimiento, además de suceder ésta fantástica aventura nocturna, también se realizan artesanalmente y siempre con excelente gusto y perfección, bonitas joyas, obras de arte y piezas únicas, con la opción de personalizarlas al gusto del cliente.

Trato inmejorable y gran profesionalidad.

Recomendable al cien por cien.

Muchas gracias y un saludo cordial.

CRISTINA GARCÍA MORENO

No llegué nunca a comprar nada, porwue iba a recoger paquetes e iba con prisa, pero se ve que tenía mucha diversidad y además era muy amable.

Yuly Vargas

La dueña es una persona estupenda y muy profesional. TODO lo que hace es PRECIOSO ? y todos sus trabajos son excelentes, de una calidad inigualable. Recomendadísima 100%